30 mayo 2007

Buscando en la web...

Lo bueno que tiene estudiar en el ordenador y tener que buscar imágenes de arte en la red es que, a veces, te encuentras con cosas interesantes. Sin ir más lejos, el otro día estaba buscando alguna imagen del Tempietto de San Pietro in Montorio del arquitecto Bramante (por mucho que se tenga la imagen en la cabeza, algunas estudiantes somos pijoteras y nos gusta tener todo un muestrario en el ordenador perfectamente colocado de forma acorde con los propios apuntes).

En fin, que encontré un blog que me ha gustado y me sorprendí bastante al ver de quién era.
Este es el blog, recomendado queda.

Sigo estudiando...

12 comentarios:

Unknown dijo...

¡¡Escucha Leguinaaaa!!

Papariro, rariro, rariino, papariro...

Laura Vila dijo...

Me quedé con las ganas de decirle eso al principio del comentario. La próxima vez será...

Anónimo dijo...

Oiga, cuando vuelva deme un grito que si no no me entero...

Tocotó dijo...

Yo intenté ponerle un comentario en su post acerca del crecepelo y no hubo manera... Igual sólo unos pocos elegidos pueden, enhorabuena. Eso, eso, avisa cuando acabes con los exámenes, esperemos que no sea al revés...

Laura Vila dijo...

Jeje, gracias. Me tocó un tema que tenía muy fresquito. (Ojalá entre en el examen de Barroco: la iconografía del mal, jeje).
Ahora que lo pienso... La iconografía del mal es un tipo bajito y con bigote.

Oyros dijo...

...y que suele tener mala leche.

Ya sabes qué debes hacer si te lo encuentras por la calle: sacarle la lengua :P

Oyros dijo...

Me refiero a la iconografía del mal.

Laura Vila dijo...

Claro.

Tocotó dijo...

Yo aun diría más, bajito, con bigote, algo alcoholico y un tanto beligerante. Se me ocurren otros calificativos, pero igual tendrías que suprimir mi comentario...

Laura Vila dijo...

Por alcohólico... Sólo me aparece Aznar, lo siento.

Tocotó dijo...

Bueno, pues quitemos lo de alcohólico y pongamos miope y judío, a ver que sale...

Laura Vila dijo...

¿Woody Allen se ha dejado bigote?. Me le imagino metiendo las fauces entre las piernas de su hija y diciéndole: "¡mira, me he dejado bigote!".
Aterrador.